Máximo Kirchner aprovechó la marcha del 24 de marzo para enviar un mensaje directo a Alberto Fernández, que se encontraba en Santo Domingo para participar de la Cumbre Iberoamericana. El líder de La Cámpora aseguró en un discurso rumbo a la Plaza de Mayo que no descarta competir en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO).
En Santo Domingo, el presidente consideró ese anunció como una victoria política personal. Sin embargo, a través de sus habituales voceros, Máximo aclaró que la competencia debe excluir a Alberto Fernández y que sólo tiene que servir para consagrar formalmente a los candidatos que Cristina Fernández de Kirchner acuerde con los distintos sectores internos del Frente de Todos.
Es decir: la estrategia interna de CFK y La Cámpora es transformar al jefe de Estado en un jarrón chino y designar a un candidato presidencial que batalle contra Juntos por el Cambio.
Alberto Fernández conoce la estrategia de la vicepresidenta y Máximo Kirchner, y ya dejó trascender adentro del Frente de Todos que no renunciará a su sueño de reelección. Su idea es competir en las PASO o dejar su lugar a un candidato que no responda a los intereses políticos de Cristina.
La interna en el Gobierno arde. Y no hay tregua a la vista.