Alberto Fernández viaja por Europa para lograr un fuerte apoyo geopolítico a su estrategia de negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Ya tiene el respaldo del premier portugués, Antonio Costa, y del jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez. Dos votos importantes en el board del FMI, pero no tan contundentes como sumar a Francia, Alemania y los Estados Unidos.
El presidente almorzará mañana con Emmanuel Macron en París. Y es probable que el jefe de estado francés también avale su estrategia de negociación. Macron y Alberto Fernández tiene una buena relación personal y política que trasciende la deuda externa y alcanza la búsqueda de una hoja de ruta para lograr la democracia en Venezuela y la aplicación del Acuerdo de París para frenar las consecuencias económicas y sociales del Cambio Climático.
Alberto Fernández necesita de los votos de Portugal, España, Francia e Italia en el board del FMI, y una vez que concluya esta gira por Europa pondrá foco en los Estados Unidos, el socio más importante del Fondo. Sin el apoyo de Joseph Biden, Argentina no podría refinanciar su deuda externa y debería pagar los 4.200 millones de deuda de capital que vencen en septiembre y diciembre de 2021.
Aún no está confirmado, pero el presidente apuesta a una reunión bilateral con Kristalina Georgieva en Roma. La directora gerente del FMI llegará a la capital italiana para participar de un seminario sobre deuda organizado por Francisco, y ese mismo viernes Alberto Fernández estará a pocas cuadras del Vaticano.
El jefe de Estado y Georgieva ya han conversado por celular y vía zoom sobre la deuda argentina por 44.000 millones de dólares, y un cónclave presencial es posible que ocurra en Roma para avanzar en una negociación que recién terminaría después de los comicios de medio termino previstos para octubre.
Alberto Fernández tiene intenciones de alcanzar un acuerdo con el FMI, pero ya le ha dicho a Georgieva que eso ocurrirá si no implica «un ajuste de la economía» similar al ejecutado por Mauricio Macri cuando ocupaba la Casa Rosada.
