Mi hijo Martín está estudiando en Moscú, y el fin de semana de semana viajó al interior de Rusia para conocer ciertos pueblos vinculados a la historia de la Unión Soviética y la Guerra Fría. En Vladimir, a 190 kilómetros de la Plaza Roja, le sorprendió cómo las fuerzas de seguridad cuidaban un mercado navideño, tras los ataques terroristas ejecutados con camiones en Niza y Berlín.
«Bloquean la ruta circundante con camiones pesados a 70 metros del mercado. Después un segundo bloqueo a 200 metros. Y no permiten a ningún auto civil estacionado en esa longitud. Los que estaban, también eran de seguridad», me describió vía WhatsApp.
Por la metodología terrorista que utiliza ISIS y sus facciones aliadas, es muy difícil prevenir los ataques. En Berlín y Niza, sorprendió la metodología, y por eso la seguridad rusa fortaleció los controles para evitar una réplica en territorio propio. Europa está militarizada y la presencia de fuerzas de seguridad se encuentra en las calles y lugares más concurridos, como shoppings, estaciones de ferrocarril y metro, y los aeropuertos locales e internacionales. La prevención está a la máxima potencia, pero ISIS cuenta con el factor sorpresa y cientos de terroristas agazapados esperando su oportunidad.
En Vladimir, nada pasó. Y tuvieron una navidad feliz. Como todos queremos alrededor del mundo.
*Información y fotos de Martín Lejtman.